
Papas nativas chilotas
Un estudio internacional publicado en la prestigiosa revista Cell denominado «Ancient hybridization underlies tuberization and radiation of the potato lineage» ha reescrito la historia evolutiva de uno de los cultivos más importantes del mundo: la papa.
A través de un análisis genómico avanzado, científicos descubrieron que el origen de la papa moderna no proviene exclusivamente de los Andes centrales, como se creía durante décadas, sino que incluye una especie silvestre nativa del sur de Chile.
¿Qué descubrieron específicamente?
El equipo, liderado por el Max Planck Institute for Plant Breeding Research (Alemania), identificó un evento de hibridación entre dos especies distintas: un ancestro andino relacionado con el tomate (Solanum lycopersicoides) y una especie chilena silvestre llamada Solanum × chilotanum.
Esta combinación genética habría ocurrido hace varios miles de años, dando origen a la base genética de muchas variedades de papa que hoy se cultivan a nivel mundial.
La investigación se basó en el análisis de más de 60 genomas completos de papas silvestres y cultivadas, recolectadas en América del Sur.
Uno de los hallazgos más impactantes fue que una proporción significativa del ADN de la papa moderna corresponde a Solanum × chilotanum, una especie que solo se encuentra en la zona sur de Chile.
Historia evolutiva de la papa
Hasta ahora, se pensaba que la domesticación principal de la papa se había dado en los Andes centrales, especialmente en Perú y Bolivia. Sin embargo, este nuevo hallazgo revela que el sur de Chile no solo fue una zona de domesticación secundaria, sino también un reservorio genético esencial.
Las condiciones climáticas particulares del sur chileno, más húmedas y templadas, habrían favorecido el desarrollo de variedades con una mayor adaptabilidad, sobre todo a ciclos de luz más largos, facilitando su expansión global hacia zonas templadas de Europa, Asia y América del Norte.
Seguridad alimentaria y la biotecnología
Este nuevo mapa genético de la papa tiene enormes implicancias. En primer lugar, revaloriza el material genético chileno como fuente de resistencia a enfermedades, plagas y condiciones climáticas extremas.
Segundo, abre nuevas puertas para programas de mejoramiento genético que busquen desarrollar papas más resistentes y productivas, especialmente en un escenario de cambio climático.
Además, para la ciencia agrícola, esta investigación pone en relieve cómo la biodiversidad nativa puede aportar soluciones a desafíos globales.
Un legado que sigue creciendo
El descubrimiento refuerza la importancia de conservar las especies silvestres chilenas y las variedades tradicionales que aún cultivan comunidades rurales en Chiloé y otras regiones del sur. Estas variedades, muchas veces relegadas al consumo local, ahora se vislumbran como joyas genéticas con potencial global.
Mientras la ciencia sigue develando los secretos ocultos en el ADN de los cultivos que alimentan al mundo, la papa, símbolo de identidad cultural y gastronómica en Chile, emerge con un nuevo relato de origen que la conecta aún más profundamente con este rincón austral del planeta.
Referencias
Zhang, Z., Huang, S., Knapp, S., Zhang, Z., et al. (2025). Ancient hybridization underlies tuberization and radiation of the potato lineage. Cell. https://doi.org/10.1016/j.cell.2025.06.034







