
Receta de torrijas de leche españolas
Las torrijas de leche españolas son una receta con múltiples variaciones, aunque todas se inspiran en esta tradicional y sencilla receta originada en la Edad Media, con su sabor clásico y casero, habitualmente consumidas en Semana Santa y Pascua.
Contenido
¿Cómo hacer torrijas de leche?
Las torrijas de leche se preparan remojando rebanadas gruesas de pan casero en una mezcla de leche, azúcar y huevos batidos, para luego freírlas en aceite o mantequilla y espolvorearlas con azúcar y canela, dando como resultado un interior suave y cremoso, con un exterior crujiente y aromático.
Información nutricional
Cada ración de torrijas de leche españolas contiene aproximadamente 350 kcal, 15 g de grasas totales, 8 g de proteínas, 45 g de carbohidratos, 2 g de fibra, 20 g de azúcares, 75 mg de colesterol y 150 mg de sodio.
Receta de torrijas de leche españolas
Preparación: 30 minutos
Cocción: 15 minutos
Raciones: 6 personas
Ingredientes
- 16 rebanadas de pan
- 100 g de azúcar
- 2 huevos
- 1 litro de leche
- 1 ramita de canela
- 1 cucharada de canela
- Aceite para freír
- Ralladura de limón
Preparación
- En una olla mediana añadir la leche, el azúcar, la ramita de canela y la ralladura de limón, calentar a fuego medio y revolver hasta disolver, llevar a hervor, retirar del fuego, tapar la olla y enfriar a temperatura ambiente.
- Distribuir la leche sobre una bandeja o bol grande, sumergir las rebanadas de pan y remojar por al menos una hora, hasta que la leche se absorba por completo.
- Batir los huevos y reservar sobre un plato hondo, rebozar las rebanadas de pan por ambos lados y freír en en abundante aceite caliente a 170°C (338°F), un minuto por lado hasta que estén doradas, retirar con un espumador y reservar sobre papel absorbente.
- En un plato hondo mezclar el azúcar y la canela en polvo, rebozar las torrijas con la mezcla y servir inmediatamente, recién hechas, acompañadas de fruta fresca o nueces picadas.
Historia del pan de torrijas
Se cree que el pan de torrijas es una receta que se remonta a la Edad Media en España, como una forma de aprovechar el pan duro o sobrante, evitando desperdiciar este alimento, que en aquel entonces era un elemento fundamental en la dieta.
A lo largo del tiempo, las torrijas han evolucionado y se han adaptado con variantes regionales y de especialidad en cuanto a ingredientes y técnicas de preparación, sin embargo, su origen humilde como una forma de aprovechar el pan duro, sigue siendo parte de su historia y encanto.
Consejos adicionales
- Para obtener unas torrijas jugosas y cremosas en su interior, es importante utilizar pan del día anterior, ya que absorbe mejor la leche, con el pan cortado en rebanadas de aproximadamente 1½ a 2 centímetros.
- El mejor pan para torrijas es aquel que tiene una corteza fina, la miga densa y es poco alveolado (burbujas interiores), como el pan candeal, siempre algo añejo.
¿Sabías qué?
Las torrijas se convirtieron en una preparación popular durante la Cuaresma en Semana Santa, debido a la prohibición a los católicos de comer carne, convirtiéndose en una alternativa dulce y energética con ingredientes accesibles que ayudaban a enriquecer el pan seco.