Por Comidas Chilenas
El pollo es un alimento básico en los hogares de todo el mundo, apreciado por su sabor y valor nutricional. Sin embargo, su mal manejo puede poner en riesgo nuestra salud más seguido de lo que creemos.
Aprender a detectar si el pollo está en mal estado es crucial para evitar intoxicaciones.
Contenido
¿Cómo detectar si un pollo está en mal estado?
Un pollo en mal estado puede mostrar varios signos de deterioro:
1. Color
El pollo debe ser de un color rosado y uniforme. Un color grisáceo o verde indica que se ha echado a perder.
2. Olor
Un olor fuerte y desagradable, similar al amoníaco, es una señal clara de que el pollo no está en buen estado.
3. Textura
Si la carne tiene una textura pegajosa o viscosa, es muy probable que esté contaminada y no debes consumirla
4. Presencia de moho
Cualquier capa verde o negra es un signo de moho y significa que el pollo debe desecharse inmediatamente
5. Hielo en exceso
Una gruesa capa de hielo en el pollo congelado indica que ha estado almacenado por mucho tiempo y puede que ya no sea seguro consumirlo.
Consejos para un preparación segura
No lavar el pollo crudo
Lavar el pollo puede esparcir bacterias peligrosas como Salmonella y Campylobacter por la cocina. En su lugar, límpielo con una toalla de papel y lave bien sus manos.
Separar de otros alimentos
Mantenga el pollo crudo alejado de alimentos frescos y listos para comer para evitar la contaminación cruzada.
Cocinar a la temperatura correcta
Asegúrese de cocinar el pollo a una temperatura mínima interna de 70°C para eliminar cualquier bacteria peligrosa.
Mantener la limpieza
Lave todas las superficies de la cocina con agua caliente y jabón después de manipular pollo crudo.
¿Qué sucede si se consume pollo en mal estado?
Consumir pollo en mal estado puede causar síntomas graves de intoxicación alimentaria, tales como:
- Malestar estomacal
- Vómitos
- Diarrea, a veces con sangre
- Dolor de estómago y calambres
- Fiebre
- Dolor de cabeza
Reglas de oro de la OMS
- Elegir alimentos tratados higiénicamente: Optar por productos pasteurizados y, si es posible, pollos tratados por irradiación ionizante.
- Cocinar bien los alimentos: Asegúrese de que los alimentos alcancen al menos 70°C en el interior para eliminar patógenos.
- Consumir inmediatamente los alimentos cocinados: No deje los alimentos cocinados a temperatura ambiente durante mucho tiempo.
- Guardar correctamente los alimentos cocinados: Mantenga los alimentos calientes a más de 60°C o fríos a menos de 10°C.
- Recalentar bien los alimentos: Asegúrate nuevamente de que todas las partes del pollo alcancen al menos 70°C.
- Evitar la contaminación cruzada: No permita que alimentos crudos entren en contacto con alimentos ya cocinados.
- Lavarse las manos frecuentemente: Especialmente después de manipular alimentos crudos.
- Mantener las superficies de cocina limpias: Lave las superficies, utensilios y paños que entren en contacto con alimentos crudos.
- Mantener los alimentos fuera del alcance de animales: Los animales habitualmente pueden transportar microorganismos patógenos.
- Utilizar agua pura: Asegúrese de que el agua utilizada para cocinar y beber sea segura e idealmente purificada.
Conclusiones
La contaminación cruzada y el manejo inadecuado del pollo son causas comunes de intoxicación alimentaria. Aplicar prácticas higiénicas y cocinar el pollo a la temperatura adecuada son medidas esenciales para prevenir enfermedades.
La OMS proporciona directrices claras para mantener la seguridad alimentaria, como evitar el contacto entre alimentos crudos y cocidos y asegurarse de que todas las superficies y utensilios de cocina estén perfectamente limpios.
Para mantener la seguridad alimentaria en casa, también es fundamental prestar atención a las condiciones de almacenamiento del pollo.
Asegúrese de mantener el pollo refrigerado a una temperatura adecuada y consúmalo antes de la fecha de caducidad indicada.
Al descongelar pollo congelado, hágalo en el refrigerador o utilizando el método de descongelación rápida en el microondas, nunca a temperatura ambiente.
Con estos consejos y precauciones, puede disfrutar de las múltiples formas en que el pollo puede prepararse y servirse, desde el tradicional mole poblano hasta el pollo asado, con la seguridad de que está protegiendo la salud de su familia.
La correcta manipulación y cocción del pollo no solo previene enfermedades, sino que también asegura que sus comidas sean tan deliciosas y nutritivas como se espera.