
Receta de mermelada de duraznos
Una sencilla pero deliciosa mermelada de duraznos ideal para aprovechar los mejores frutos de la estación y disponer de un dulce acompañamiento para todo el año.
Contenido
¿Cómo hacer mermelada de durazno?
Una de las ventajas de preparar mermelada de duraznos es la amplia variedad de tipos disponibles en el mercado, lo que te permitirá experimentar a partir de las diversas variedades de esta magnifica fruta.
Información nutricional
Cada ración de mermelada de duraznos contiene aproximadamente 300 kcal, 76 g de carbohidratos, 2 g de proteínas, 4 g de fibra y 74 g de azúcares.

Mermelada de duraznos de la abuela
Preparación: 90 minutos
Cocción: 20 minutos
Raciones: 6 personas
Ingredientes
- 3 kg de duraznos
- 1 ½ kg de azúcar
- 1 limón
Preparación
- Lavar muy bien los duraznos en agua fría, pelar y extraer cualquier superficie dañada y cortar en trozos medianos, descartar los carozos y reservar la fruta en un bol grande. Cubrir los duraznos picados con el azúcar, cubrir con papel film y reposar en el refrigerador por al menos 60 minutos.

- Trasladar la fruta macerada a una olla gruesa y añadir el jugo de limón, revolver con una cuchara de madera para integrar y cocinar a fuego alto hasta que comience a burbujear, retirar la espuma y mantener la cocción por unos 10 minutos o hasta obtener la textura deseada, moliendo la fruta con la cuchara hasta formar un puré.

- Envasar la mermelada aún caliente en frascos de vidrio esterilizados y secos, tapar y enfriar boca abajo. Mantener refrigerada y reposar un par de días. Servir la mermelada de duraznos fresca y fría como acompañamiento de panes o postres.

Equivalencias azúcar y endulzantes
Beneficios y propiedades
Los duraznos son ricos en vitamina C y compuestos fenólicos que ayudan a promover la creación de colágeno y a combatir el daño de los radicales libres en el cuerpo. La fibra y los antioxidantes de los duraznos pueden contribuir a la salud del corazón y reducir el riesgo de enfermedades cardíacas.
¿Sabías qué?
El durazno es un árbol originario de Afganistán, China e Irán, que luego llegó a occidente a través de los romanos, quienes creían que era originario de Persia, lo cual todavía se ve reflejado en su nombre científico: «Prunus persica».






