
Salsa de champiñones laminados chilenos
Una deliciosa receta de champiñones en salsa blanca, suave y cremosa, ideal para disfrutar como acompañamiento de todo tipo de carnes o pastas, con las que marida perfectamente.
Contenido
- ¿Cómo hacer salsa de champiñones?
- Información nutricional
- Receta de salsa de champiñones fácil
- Consejos caseros adicionales
- ¿Se pueden usar otros tipos de champiñones?
- ¿Cómo evitar que se cocinen en exceso?
- ¿Cómo conservar la salsa de champiñones?
- ¿Qué opciones hay para intolerantes a la lactosa?
- ¿Se puede congelar la salsa de champiñones?
- Beneficios de los champiñones
- ¿Sabías qué?
- Recomendamos
¿Cómo hacer salsa de champiñones?
En general, para preparar esta salsa de champiñones se utiliza el denominado champiñón de París, el cual puedes encontrar fácilmente en cualquier mercado, pero indistintamente puedes prepararlo con el o los champiñones de tu variedad favorita.
Información nutricional
Cada ración de salsa de champiñones contiene aproximadamente 90 kcal, 3 g de proteínas, 6 g de grasas (2 g saturadas), 25 mg de colesterol, 7 g de carbohidratos, 5 g de azúcares y 200 mg de sodio.

Receta de salsa de champiñones fácil
Preparación: 20 minutos
Cocción: 10 minutos
Raciones: 8 personas
Ingredientes
- 400 ml de leche entera
- 2 tazas de champiñones
- 2 cucharadas de harina
- 1 cucharada de aceite
- Sal fina
- Pimienta negra
Preparación
- En una olla mediana, derretir la mantequilla a fuego medio, añadir la harina cernida y revolver todo con una cuchara de madera hasta disolver por completo, sin formar grumos, hasta obtener una masa de suave consistencia. Añadir la leche poco a poco sin dejar de revolver y cocinar a fuego medio-alto hasta alcanzar el hervor y espesar. Salpimentar a gusto.

- En una sartén grande, calentar el aceite a fuego medio y añadir los champiñones poco a poco, sin sobreponerlos (si es necesario, repetir la cocción las veces que sea necesario), uno al lado del otro, y cocinar sin revolver por unos 2 a 3 minutos, hasta que estén dorados; girarlos suavemente y repetir la cocción hasta dorar nuevamente.

- Verter la salsa blanca de leche en la sartén, revolviendo suavemente para integrar todos los aromas y sabores. Servir la salsa de champiñones inmediatamente, caliente, opcionalmente acompañada de crutones recién elaborados o como acompañamiento de carnes rojas y blancas. Se puede mantener refrigerada por hasta 3 días.
Consejos caseros adicionales
- Para intensificar el sabor, saltea los champiñones con un poco de ajo picado y una pizca de tomillo fresco o seco antes de añadir la salsa blanca.
- Utiliza leche entera o crema para un acabado más cremoso y untuoso, ajustando la cantidad para lograr la textura deseada sin perder ligereza.
¿Se pueden usar otros tipos de champiñones?
Sí, puedes usar variedades como portobello, shiitake o champiñones silvestres, aunque el sabor y textura variarán ligeramente.
¿Cómo evitar que se cocinen en exceso?
Cocínalos a fuego medio-alto sin moverlos demasiado, permitiendo que se doren bien antes de voltearlos para conservar su firmeza.
¿Cómo conservar la salsa de champiñones?
Guárdala en un recipiente hermético en el refrigerador por hasta 3 días y recalienta suavemente sin hervir para evitar que se corte.
¿Qué opciones hay para intolerantes a la lactosa?
Puedes sustituir la leche entera por leche vegetal sin azúcar, como leche de avena o almendra, y usar harina sin gluten si se requiere.
¿Se puede congelar la salsa de champiñones?
Sí, pero es recomendable congelarla en porciones pequeñas para evitar pérdida de textura; al descongelar, calienta despacio y mezcla bien.
Beneficios de los champiñones
Los champiñones son una rica fuente de vitaminas del grupo B y D; contienen además potasio, fósforo y hierro, que lo convierten en un aliado en la prevención de múltiples enfermedades como la diabetes. Son muy bajos en calorías y se recomienda cocinarlos tan solo ligeramente para facilitar su digestión sin añadir demasiada grasa.
¿Sabías qué?
El champiñón de París o champiñón común (Agaricus bisporus) es una seta de la familia Agaricales nativa de Europa y América del Norte, cultivada profusamente con fines gastronómicos en todo el mundo.
¿Cómo adaptar esta receta a una versión vegana o vegetariana?
¿Cómo adaptar esta receta a una versión sin gluten?
¿Cómo adaptar esta receta a una versión keto (cetogénica)?
Recomendamos
- Receta de salsa alioli casera
- Risotto de hongos chilenos
- Receta de huevo mol chileno
- Ponche de chirimoya casero







