
Chupe de centolla magallánica
El chupe de centolla magallánica es sin duda un plato exquisito, elaborado con un producto nacional de excelencia, aunque a veces difícil de encontrar, pero que es marca distintiva de la cocina patagónica chilena.
Contenido
Información nutricional
Cada ración de chupe de centolla contiene aproximadamente 450 kcal, 20 g de carbohidratos, 30 g de grasas, 25 g de proteínas, 2 g de fibra, 4 g de azúcares, 120 mg de colesterol y 600 mg de sodio. (*)
(*) Los valores estimados pueden variar según los ingredientes y porciones.
¿Cómo hacer chupe de centolla?
Al preparar esta receta, el sabor de la centolla se intensifica con el aporte del queso parmesano y como complemento, siempre puedes acompañarlo con un vino blanco fresco, intenso y mineral.
Preparación: 60 minutos
Cocción: 30 minutos
Raciones: 4 personas
Ingredientes
- 500 g de carne de centolla
- 240 ml de caldo de pescado
- 120 ml de crema fresca
- 100 g de queso rallado
- 30 ml de aceite
- 30 ml de mantequilla
- 2 tazas de pan remojado
- 2 hojas de laurel
- 1 cucharadita de pimentón
- 1 cebolla picada fina
- 1 diente de ajo picado
- 1 cucharadita de orégano
- Sal de mar
- Pimienta negra
Utensilios necesarios
Preparación
- Llenar una olla grande con agua y añadir 3 cucharadas de sal de mar entera y opcionalmente, 2 hojitas de laurel. Si la centolla está viva, incorporarla a la olla con el agua fría para que las patas no se desprendan durante la cocción. Si la centolla ya está muerta, primero hervir el agua antes de introducirla en la olla.
- Una vez que el agua vuelva a hervir luego de añadir la centolla, cocinar por 15 a 18 minutos dependiendo del tamaño, retirar del agua, desprender la carne del caparazón, desmenuzar y reservar. En una olla calentar, añadir el aceite y calentar a fuego medio, incorporar el ají de color, el ajo picado, la cebolla y sofreír hasta que estén blandos, sin dorar, añadir el orégano, el caldo de pescado y llevar a ebullición.
- Incorporar a la olla la carne de centolla desmenuzada, el pan remojado en la leche, el queso rallado y la mantequilla, cocinar a fuego medio y revolver cuidadosamente hasta que la mezcla espese. Salpimentar a gusto e incorporar la crema fresca, revolviendo hasta homogeneizar. Encender y precalentar el horno a unos 190°C (374°F) por al menos 10 minutos.
- Vaciar la mezcla en una fuente de horno, distribuir el resto del queso rallado sobre la superficie y hornear por unos 10 minutos hasta que esté dorado. Servir el chupe de centolla magallánica inmediatamente, bien caliente, opcionalmente coronado con un poco de perejil o cilantro fresco picado.
Consejos adicionales
- El pan ligeramente seco absorbe mejor los líquidos sin deshacerse por completo, dando al chupe una consistencia más cremosa y uniforme, realzando los sabores al integrarse mejor con la mezcla.
- Si deseas aportar un matiz ahumado y un leve picor característico del sur de Chile, incorpora una pizca de merkén o ají seco molido al sofrito para intensificar el sabor sin opacar la centolla.
Preguntas frecuentes (FAQ)
¿Se puede congelar el chupe de centolla?
Sí, se puede congelar después de hornearlo, aunque se recomienda consumirlo dentro de 1 mes para mantener su textura y sabor. Al descongelar, caliéntalo lentamente en el horno.
¿Puedo usar otro tipo de pan?
Sí, pero evita panes integrales muy húmedos, ya que pueden alterar la textura final del chupe.
¿Se puede sustituir la crema fresca por leche?
Se puede, pero la textura será menos cremosa y el sabor menos intenso. Una alternativa es mezclar leche con un poco de mantequilla para aproximar la riqueza de la crema.
¿Qué otros mariscos combinan con la centolla?
Puedes añadir trozos de camarón o almejas para un chupe más complejo, pero es importante no sobrecargar la receta para que el sabor de la centolla siga siendo protagonista.
¿Qué vino acompaña mejor este plato?
Lo ideal es un vino blanco seco, fresco y mineral, como un Sauvignon Blanc o un Chardonnay sin crianza en barrica, que complementen la riqueza del marisco sin opacarlo.
Beneficios de consumir centolla
La centolla es un marisco bajo en grasas y rico en proteínas magras, que además aporta ácidos grasos omega-3, vitaminas esenciales y minerales como el zinc y el selenio. En comparación con algunos otros mariscos, la centolla tiende a tener un contenido bajo en mercurio, lo que la hace una opción segura para el consumo.
¿Sabías qué?
La centolla magallánica (Lithodes santolla), también llamada centolla patagónica, centolla austral o centolla chilena, es un crustáceo que habita el lecho marino de las frías aguas del sur de Chile, desde Valdivia al Cabo de Hornos.
¿Cómo adaptar esta receta a una versión vegana o vegetariana?
¿Cómo adaptar esta receta a una versión sin gluten?
¿Cómo adaptar esta receta a una versión keto (cetogénica)?
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Marcela
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la legislación suiza que se preocupa de los animales en materia de protección animal, el animal como este crustáceo al tener sistema nervioso SÍ padece dolor, sino agarre un libro de zoologia y neurologia.