
Receta de cheesecake de frambuesas
El cheesecake de frambuesas chilenas es una deliciosa variante local de este clásico postre, que incorpora la frescura y el sabor único de las deliciosas frambuesas del país, combinando la cremosidad del queso crema con la acidez y dulzura de las frutas.
Contenido
¿Cómo hacer cheesecake de frambuesas?
Este cheesecake se compone de una base de galletas trituradas, seguida de una suave capa de queso crema mezclado con frambuesas frescas enteras que crea una combinación de texturas y sabores hace que cada bocado sea una experiencia memorable.
Información Nutricional
Receta de cheesecake de frambuesas
Ingredientes
1. Base
- 200 g de galletas de vainilla
- 100 g de mantequilla derretida
2. Relleno
- 500 g de queso crema
- 200 g de frambuesas chilenas frescas
- 150 g de azúcar
- 3 huevos
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
Preparación
- 1. Encender y pre-calienta el horno a 180°C (356°F) por al menos 10 minutos.
- 2. Triturar las galletas de vainilla en un procesador de alimentos o minipimer hasta obtener migas finas, reservar en un bol grande e incorporar la mantequilla derretida y mezclar hasta obtener una mezcla homogénea.
- 3. Distribuir la mezcla sobre un molde para cheesecake y presionar distribuyendo de formar uniforme hasta cubrir la base. Reservar.

Base de galletas trituradas
- 4. En un bol mediano añadir el queso crema, el azúcar y continúa batiendo hasta que la mezcla esté cremosa, incorporar los huevos uno a la vez, la esencia de vainilla, la mitad de las frambuesas y mezclar hasta integrar todo Mezcla bien.
- 5. Verter la mezcla de queso sobre la base de galletas en el molde y hornear por unos 45 minutos, retirar y enfriar a temperatura ambiente.
- 6. Cubrir el cheesecake con frambuesas frescas y espolvorear con azúcar al gusto, luego refrigerar por al menos 4 horas antes de servir.
Historia del cheesecake
La receta más antigua conocida de un postre similar al cheesecake proviene del libro «De Agri Cultura» de Catón el Viejo, un autor romano del siglo II a.C. que incluía queso, miel y harina, ingredientes que más tarde se convertirían en componentes clave del cheesecake moderno.
Sin embargo, la versión más cercana al cheesecake que disfrutamos hoy en día evolucionó en la Edad Media cuando los cocineros europeos empezaron a experimentar con ingredientes locales y adaptaron la receta, reemplazando el queso envejecido por queso fresco, dando lugar a un postre más suave y cremoso.
¿Sabías qué?
Las frambuesas chilenas son conocidas por su intenso sabor y color vibrante debido al clima y suelo favorables de la región, no sólo deliciosa, sino que además como una excelente fuente de antioxidantes que contribuyen a la salud cardiovascular y la prevención de enfermedades.